"Caelum non animum mutant qui trans mare currunt"

28 de enero de 2010

▪ The End is Soon to Come



PATOLOGÍA: Miedo al suicidio

Estaba sumergido de lleno en las páginas de El lobo estepario (¡qué maravilla!), pero cada tanto se distraía porque hacía mucho calor. Por eso, dejó de leer (se refregó los ojos, se puso de pie) y fue al baño. Se mojó la cara un poco (¡qué frescura!) y, con las gotas bajando por su rostro y los ojos cerrados, tanteó en busca de la toalla blanca. No la encontró. Abrió los ojos y miró con miedo lentamente hacia abajo. Allí estaba, en el suelo. La toalla, ya vieja, se había suicidado.

Ahí no más entró en pánico. Las gotas le caían y no tenía toalla. La había perdido para siempre. La tomó con cuidado y la enterró dejó en la pileta del lavadero. Corrió enloquecido al otro baño de la casa temiendo lo peor. Tristemente, esa otra toalla, que otrora había colgado desde lo alto, yacía ya sin vida sobre la pileta del baño. "Es el fin", se dijo con amargura. Agitado, siguió corriendo por la casa. En la cocina, una servilleta usada se había tirado caído de la mesada al piso. En la entrada, las llaves estaban al pie de la puerta, como si hubieran intentado saltar y quitarse la vida escaparse, sin éxito. En su dormitorio, algo de ropa yacía pálida y fría inerte en el suelo (claro que su angustia es entendible: se sentía usada).

Se detuvo frente al ventanal que daba al fondo y vio que las flores blancas del ciruelo también se suicidaban, una tras otra. "Hoy todo tiene que morir", se dijo. Pero en realidad no era una obligación, sino una voluntad: todo quería morir. En ese mismo momento, mientras todo caía y se desplomaba, temió profundamente (¡Dios no lo permita!) que se produjera un suicidio en masa, sin saber que en cuestión de pocos minutos (Dios permite todo) se largaría a llover.

(2010)






7 comentarios:

alvarodrv dijo...

Muy interesante y original relato :) Cada vez que se me caiga la toalla o una servilleta me acordaré de ti jeje un saludo!

Sheila dijo...

Bonita metáfora sobre cómo nos podemos sentir a veces... muy bonita. Personalmente me alegro de que ese dios lo permita todo, aunque no sea yo de pedirle muchos permisos ni perdones.

Herman Hesse... I´ve nothing else to add when writing his name... It is enough!

Como siempre, un placer leerte.

Kris Diminutayazul dijo...

Ya veo que además de Tiersen y Cortázar, compartimos buen gusto por Hesse :P

todo va muriendo poco a poco, es parte del curso de la vida, dicen... aunque también es algo necesario para dejar sitio a otras que, también poco a poco, van naciendo

me gusta tu idea de soplar de allá para acá... crees que nos podríamos coordinar, simplemente unos instantes?

buen finde, disfruta de tu libertad!
mi fin también se acerca, pero en mi caso.. fin de exámenes :)

Chano dijo...

Me gustan mucho las cosas que escribís. Felicitaciones

no importa quien soy dijo...

Genial.
Sencillo, corto, directo. ME PONGO DE PIE PARA APLAUDIR, TAN HERMOSA Y TRISTE HISTORIA.

Uno de los mejores escritos que debo haber leído, en los distintos blogs.

Permitime anotar tu blog, en mis favoritos, para saber cada vez que publicás.

Te felicito Edgardo. Sinceramente genial. Cuando seas un gran escritor, voy a poder decir que fuí uno de tus primeros lectores!

Dreamer dijo...

Bueno, los demás ya dijeron todo...simplemente me sumo a los comentarios...un muy buen relato!! hay veces en que todo muere un poco cada día...y un poco de nosotros mismos también...bien transmitida la sensación...
saludos!!

Alba dijo...

Sencillamente hermoso.